Un edificio está conformado por una estructura e instalaciones que requieren revisión y mantenimiento para garantizar una estancia en óptimas condiciones para sus vecinos.
Desde Fincas Heredero te contamos qué debes de considerar para que tu edificio no sufra las adversidades del invierno.
Un diseño deficiente de la envolvente de los edificios, las instalaciones inadecuadas de cerramientos, iluminación, electricidad y sistemas de climatización, se vuelven más vulnerables a sufrir las inclemencias de la lluvia, la nieve y las heladas del invierno.
Además, el ahorro energético en una comunidad es fundamental debido al gran gasto que implica para los vecinos.
En algunos casos, la rehabilitación de edificios es necesaria para reducir el consumo de energía.
Ante la llegada del invierno, es importante realizar una revisión previa para establecer las medidas correctoras necesarias y poner en condiciones óptimas las instalaciones del edificio.
Entre las medidas sugeridas para mejorar el estado general del edificio podemos destacar las siguientes:
A su vez, las inclemencias climáticas pueden generar problemas de humedad en paredes y techos.
Para evitar posibles inconvenientes, una solución es colocar un aislamiento térmico a las fachadas.
Otra opción es instalar fachadas ventiladas, revistiendo la fachada con paneles en su exterior y dejando una cámara de aire para evitar el flujo directo de frío desde el exterior.
A su vez, se puede sustituir las ventanas por otras más eficientes, colocando ventanas de doble cristal de aluminio o PVC con puente térmico.
Por ejemplo, servicios que son usados por los usuarios y castigados por las inclemencias climáticas como son la antena o el portero automático o videoportero.
Por otra parte, para optimizar el ahorro energético, es necesario adecuar la potencia eléctrica de energía contratada al uso real de la comunidad.
Utilizar bombillas de bajo consumo y sustituir las lámparas convencionales por luces de iluminación LED ayuda a mejorar el rendimiento energético.
Por ejemplo, si se sustituye una caldera de gas por una de condensación con gas natural se puede obtener un ahorro de un 40%.
En la actualidad, existen diferentes normas de seguridad que obligan a las comunidades de vecinos a pasar controles de sus instalaciones.
Entre las distintas revisiones a realizar podemos destacar las siguientes:
Las zonas comunes del edificio que tienen una potencia superior a 100KW deberá ser revisada cada 10 años.
A su vez, cada 5 años se deberá revisar las instalaciones bajo tierra para realizar una prueba de estanqueidad, donde se observarán las tuberías y los tanques de almacenamiento que no sean de doble pared antifugas.
Las inspecciones en una comunidad de vecinos se deben llevar a cabo por un técnico especializado que pertenezca a cualquier Organismo de Control Autorizado (OCA).
Para una comunidad de vecinos es primordial realizar todas las revisiones que indica el Administrador.
Es la persona idónea para detectar, corregir y poner al día todas las instalaciones del edificio.
En Fincas Heredero podemos ayudarte a revisar las instalaciones de tu comunidad y preparar el edificio para hacer frente a las inclemencias drásticas del tiempo.